Apego Emocional

La ansiedad de tu ausencia en vez de disminuir crece dentro de mi todos los días, no hay un segundo en el que no piense cómo sería si estuvieras conmigo. Guardo en mi memoria todos los recuerdos de nuestros pequeños momentos que eran los mejores de mi vida, cuando hiciste que mi pensamiento cambiara, gracias a ti soy mejor hoy, pero sin ti no tiene ningún sentido.

Sé que estarás mejor sin mi porque ya te hice mucho daño intentando superarte aunque falle siempre. Me encantaría correr tras de ti, sin pensar mucho en si eso cambiará algo de lo que he hecho, pero no puedo vivir con la idea de que ni siquiera pude disculparme.

Seguramente hay millones de personas mejores que tu, dispuestas a estar conmigo, pero yo no quiero seguir intentándolo, no tengo paciencia para construir nada y perdí el sentimiento de estabilidad. Ya no confío en nadie, no tengo ni un solo amigo cerca que pueda abrazarme.

Te extraño cada que salgo a caminar o cuando me echo en la cama y deseo poder aparecer en tu pecho porque mi hogar estaba entre tus brazos; incluso te escucho en mi cabeza dándome consejos cuando no sé qué hacer. Lo he jodido, desbarate esto buscándote cerca de mi porque no puedo si estas lejos, no puedo sabiendo todo lo que debo esperar, no puedo porque dentro de mi te volviste indispensable.

He cambiado mucho en tan solo un mes, te había dejado encargado de mi autoestima, de mis problemas laborales y ahora que estoy sola con todo esto entiendo que tengo un problema de apego que no me deja quererme a mi para luego empezar con los demás. Tu ausencia dejo esa puerta muy abierta y me hice todo el daño que no te imaginas.

Suscribe Roxana... "Estoy segura de que el sentimiento de incertidumbre por si hubiera funcionado, jamás lo vamos a dejar de sentir. Cuídate que espero verte algún día de nuevo"


No hay comentarios:

Publicar un comentario